El Servicio Catalán de Tráfico (SCT) es el gestor del tráfico y la seguridad viaria en Cataluña. El SCT se remonta en el antiguo Instituto Catalán de Seguridad Viaria (ICSV). Se creó el 1991 con dos objetivos principales: reducir la frecuencia y la gravedad de los accidentes de circulación e incrementar los medios y los recursos destinados a la prevención de los siniestros y a la atención de las víctimas.
A finales del 1997, la Generalitat de Cataluña asumió las competencias en materia de tráfico y circulación de vehículos a motor. En estos momentos, se creó el SCT en sustitución de la ICSV, a través de la Ley 14/1997, de 24 de diciembre.